¿Qué significa engañar?

Comprender los motivos de las trampas puede ser a veces muy difícil, ya que responder a la pregunta

“¿Qué es hacer trampa?”

Más aún, porque a menudo no es fácil definir los límites del comportamiento adúltero.

Además, hay muchas desigualdades entre lo que se considera engaño extramatrimonial entre hombres y mujeres, hay comportamientos que un género puede superar y otro no.

Según una entrevista realizada a 1.500 personas, se comprobó que los hombres son menos intransigentes que las mujeres cuando se trata de un comportamiento equívoco. Con respecto a besar a otra persona, tanto los hombres como las mujeres parecen ser indulgentes, los primeros más que las segundas, ya que no consideran ese tipo de contacto físico como un engaño e intentan ir más allá del simple gesto.

A muchas mujeres también les molesta mucho que su pareja coquetee con otra chica verbalmente o que piense en otra chica con anhelo, aunque estas cosas no deben considerarse como traición física.

Los hombres, en cambio, parecen ser más comprensivos en este caso; la mayoría lo dejaría pasar. Este entendimiento y el diferente origen de la concepción de la infidelidad se derivan del hecho de que los hombres a menudo, si no el doble, que las mujeres, se encuentran en situaciones comprometidas o coqueteando con otra parte, aunque no haya intención de engañar.

Todo el mundo está de acuerdo en que la infidelidad sexual, tanto los hombres como las mujeres, la consideran una pura traición, mientras que hace que uno se pregunte sobre la forma y el momento de la traición. Paradójicamente, parece que es más fácil perdonar una traición de larga duración que una aventura de una noche.

¿Por qué toda esta ilógica? La respuesta parece ser muy clara, de hecho, mientras que el rollo de una noche se considera y se percibe más como la locura de un momento, la relación a largo plazo representa una necesidad de la pareja, una carencia o un vacío que no hemos podido llenar.

En este caso, uno se da cuenta de que la responsabilidad de las escapadas extramatrimoniales es también nuestra, admitiendo que hemos descuidado la vida de pareja y empujado al compañero a encontrar lo que necesitaba en otra parte.

Si, tras una traición, uno es capaz de encontrar la lucidez y la serenidad para afrontarla y analizarla, también puede ser un estímulo para reconstruir un vínculo que se ha desgastado un poco por el tiempo y la rutina, y reforzarlo.

Afrontar la traición con la debida madurez puede llevar a transformar el comportamiento negativo en algo constructivo para la pareja, puede ser el impulso para volver a hablar, para entender los problemas y analizarlos juntos, para comprender qué ha llevado a la pareja a buscar la felicidad en otra parte y suplir las carencias.

Esto no significa que la traición sea algo bueno o que deba tratarse a la ligera. La honestidad y la claridad deben ser lo primero en una relación de pareja, y antes de embarcarse en un gesto de este tipo, sería mejor intentar hablar con tu pareja y explicarle tu malestar, decirle lo que te pasa y lo que te gustaría.

La traición física hecha por puro placer, la de una noche, la de una aventura rápida con un desconocido, quizás conocido en un sitio de citas online , puede callarse, al menos según la opinión de los entrevistados, que creen que no tendría sentido arruinar una relación amorosa duradera por la locura de una vez.